El Banco Central Europeo deja de producir nuevos billetes de 500 euros desde 2019 y retirará las notas que recupere. Ya hoy, muchas tiendas ya no aceptan billetes de 200 y 500 euros. Los bancos solo cambian dinero depositándolo en una cuenta y luego recogiéndolo en otra denominación. Pero el 50% de las tenencias de efectivo en euros se encuentran fuera de la zona euro y se acumulan allí principalmente porque la moneda de su propio país está perdiendo valor constantemente. Aproximadamente el 21% de las tenencias en efectivo consiste en billetes de 500 euros. Hace tres años seguía siendo del 27%. Es probable que el 50% fuera de la zona euro no conste de monedas o billetes pequeños. Pero si los ahorradores extranjeros no pueden recuperar su dinero porque no tienen una cuenta bancaria en la zona del euro y, por lo tanto, no pueden cambiar y no pueden comprar con sus grandes billetes, la confianza en la moneda europea se verá afectada.

Probablemente será posible durante años más devolver las grandes notas a la moneda nacional. Pero los ahorradores extranjeros no confían en su propia moneda y luego intercambiarán su dinero en dólares estadounidenses. Pero tienes que comprar moneda extranjera más cara de lo que puedes venderla. La diferencia es de aproximadamente el 5%, lo que pierde el ahorrador de ida y vuelta. Sin embargo, esto es aún más barato que viajar con el dinero en la zona del euro y allí por conocidos en su cuenta bancaria (los extranjeros no tienen cuenta bancaria) para cambiar a billetes pequeños. A menudo hay una gestión de divisas, por lo que el retorno a la moneda nacional es probablemente posible en su totalidad, pero no la compra renovada de la moneda extranjera. Además, muchos ahorradores quieren permanecer en el anonimato. Por lo tanto, debe comenzar a pensar en cómo quiere protegerse de perder valor en sus ahorros.

El BCE también debería pensar. Ella está interesada en el hecho de que los más de 500 millones de billetes de 500 euros, que se encuentran en gran medida en bóvedas en el extranjero, no se intercambian por billetes de 2.500 millones de 100 euros, que tuvieron que reimprimir. Para esto, sin embargo, se debe mantener la confianza en el valor de los billetes grandes. Debe crear una estructura para que los ahorradores extranjeros puedan canjear sus billetes de 500 euros de forma gratuita (o barata), discretamente y sin burocracia en billetes de 100 euros. En los principales países con grandes cantidades de efectivo en euros, especialmente en Rusia y Ucrania, los fideicomisarios deben mantener una mayor tenencia de billetes de 100 euros para poder ofrecer de manera creíble el intercambio de billetes grandes.

También podría valer la pena que los bancos alemanes se hagan cargo de las grandes cuentas, también en condiciones que ya no son perfectas, del extranjero. Tendrían que señalar los riesgos en los medios de comunicación y promover la adquisición. En tiempos de interés negativo se puede almacenar con billetes de 500 euros, la cantidad de dinero 5 veces sin interés negativo en sus propias bóvedas, al igual que con los billetes de 100 euros. Los costes de la logística de cambio en la zona no euro podrían compensarse. Si esta opción tuviera éxito, el BCE tendría que asumir los costos de imprimir los billetes adicionales de 100 euros (por ejemplo, duplicar su volumen actual) y, al mismo tiempo, reducir el rendimiento de las tasas de interés negativas.

Será interesante ver cómo el BCE, los bancos y los ahorradores extranjeros lidiarán con la abolición de facto de los billetes de 500 euros.